Lo Imposible, mucho más que una historia de supervivencia
Este puente he tenido el privilegio de disfrutar de una de esas películas especiales. Una de esas que te hacen aflorar los mejores sentimientos. Una de esas que hacen que te reconcilies con, el cada vez más desagradable, entorno. Una de esas por las que merece pagar (21% de I.V.A. incluido).
Es presentada como una historia de supervivencia de una familia española tras el tsunami de Tailandia, y lo es, pero quedarse ahí sería quedarse muy corto. De hecho para mí tiene momentos mucho más impresionantes que el del reencuentro de la familia. No hay que quitarle valor, ni mucho menos, aunque el amor hacia los hijos es incondicional y la entrega por la pareja se da por supuesta, habría que ver qué haríamos los demás cuando ves peligrar tu propia vida.
A mi me llega mucho más dentro, hasta lo más profundo de mi ser, la muestra de amor, entrega y sacrificio por el supuestamente extraño. Digo supuestamente porque en el fondo todos tenemos "algo" en común con el resto de personas que nos atrae de una manera irresistible. Me hace plantearme varias preguntas de las cuales, por suerte o por desgracia, no tengo una respuesta clara:
- ¿Por qué un "extraño" te ofrece lo que tiene sin esperar nada a cambio?
- ¿Realmente no se obtiene nada a cambio al darse a los demás sin condición?
- ¿De dónde proviene la fuerza que empuja a hacer tales cosas?
- ¿Será La Naturaleza, quizás será Dios o el Karma?
- ...
La lista podría ser eterna. En este momento, para mí, no es importante encontrar la respuesta, es más, estoy seguro de que no existe una sola respuesta para cada pregunta.
En conclusión, lo que más me ha gustado de Lo Imposible no ha sido ninguna escena en particular, ni la historia en general, sino que ha sido el que me ha hecho conectar con el valor más preciado que tengo, la vocación de servicio, esa que me hace levantarme cada día alegre porque me espera un día con los jóvenes.
LO IMPOSIBLE ES NO DARSE A LOS DEMÁS
