¿Quién soy yo para juzgar al prójimo?
Si eres capaz de ver más allá, más dentro, hasta llegar a ver lo que importa de las personas te das cuenta de que todos somos más parecidos de lo que aparentamos ser.
Cuando consigues pensar por ti mismo y te olvidas del "¿qué dirán?" te sientes realmente libre y te olvidas de los estereotipos.
Sed libres amigos míos